TENEMOS QUE DESTRUIR LA MAFIA DELINCUENCIAL
Rafael Correa se creía el dueño del país. Forjó un plan fascista políticamente orientado hacia el castro-comunismo, propaganda goebeliana, dominio de los estamentos sociales, descalificación e insulto, brigadas bolivarianas de choque (Waffen-SS), cooptación de poderes (Legislativo, Judicial, Participación y control) , destrucción de la economía (deuda y déficit), consumismo, despilfarro, endeudamiento, pero más grave aún: corrupción galopante.
Es de dominio público la presencia de una gavilla de rateros que se instaló en el gobierno de Rafael Correa para extraer de las arcas fiscales todo lo que estuvo a su alcance.
Se lo hizo preparando de manera cuidadosa la estructura de poder, que permitiera bloquear cualquier forma de denuncia o filtración de procesos ilícitos. Delincuencia organizada, obsecuencia, complicidad y mordaza.
Tres niveles de incondicionalidad. Una política partidista, otra delincuencial y propagandística. Con la primera asegurando un entramado cercano, la segunda con confidencialidad para negociados turbios y testaferrismo y la tercera para asegurar permanencia y encubrimiento.
La estructura del poder se aseguró de preparar instrumentos de aparente legalidad de la gestión, redes de corrupción triangulada, estructuradas entre contratista, gerente institucional y fiscalizador; manejo del dinero indetectable, cuentas de empresas offshore, sobreprecios, facturación falsa, consultoría engañosa, sub-contratos y contratos modificatorios.
Eso ocurrió por ejemplo en la repotenciación de la refinería de Esmeraldas. El Gerente de Petroecuador y de Refinación, nombrado por el Ministro Pareja Yanuselli que antes fue gerente de refinación y de Petroecuador. Todo venía estructurándose para tomar al asalto ese proyecto. Bravo, en un acto colusorio con los contratistas, acuerda bajo las normas del “giro específico del negocio” costos duplicados para provisión de partes de la refinería, que a la vez volvían a contratar con los verdaderos proveedores a costo menor, obteniendo ganancias extraordinarias los contratistas y el gerente, que pasaban a ser depositadas en el extranjero, en cuentas repartidas entre los “socios” del negocio.
Para conseguir fluidez de la operación ilícita, tenían que contar con un fiscalizador “amigo” el consorcio Worley Parsons-Azul, que inexplicablemente no ha sido demandado, además del auditor interno de Petroecuador y el Contralor del Estado. Toda una gavilla coludida para el reparto, con un Fiscal encubridor!
A quién reportaban los delincuentes. Al Ministro encargado de los sectores estratégicos y posterior Vicepresidente del País, que coincidentemente fueron la misma persona.
La misma gavilla en acción en la preventa de petróleo a China. Un acuerdo triangulado entre Glas, Petrochina y los transportadores del crudo manejados por Enrique Cadena Marín. Precio por barril a la baja, costo de transporte tres veces más costoso y acuerdo para el reparto. Petrochina se beneficiaba con el precio a la baja, el cobro de altos intereses por el crédito (7.8%), los intermediarios por el valor de transporte de cada barril que a la vez debían repartirlo con los oficiales del gobierno que autorizaban los embarques. Correa, Glas y el Gerente de comercialización, en una danza de transacciones bancarias que está por ser develada.
Correa procedió a encargar áreas sensibles a gente de su confianza, para que ejecute un plan de recaudación corrupta de sectores fiscales con alto flujo financiero. CFN-no más impunidad, Banco Central, a su primo; Vías nacionales sin licitación a Jorge Marún; telecomunicaciones a Jorge Glas; Petróleos a Alecksey Mosquera, Esteban Albornoz, Miguel Calahorrano; Hidrocarburos Galo Chiriboga Derlis Palacios, Germánico Pinto, Wilson Pástor, Pedro Merizalde, Carlos Pareja Yannuzzelli. José Icaza Romero, Nilsen Arias, muchos de ellos procesados por corrupción.
Cuando se consguía fondos para algún programa específico, el secretario de comunicación pasaba al ministerio encargado de ejecutar el proyecto, como en “All you need”.
Para poder controlar la contratación de proyectos pequeños creó una oficina centralizada de construcciones. Hospitales, Colegios, Vías.
Para obtener anticipo efectivo en las concesiones de campos maduros, su abogado creó la figura de “derecho Intangible”.
Todo este proceso descrito viene acompañado por un frenético endeudamiento a plazos cortos y alto interés, prendando en muchos casos bienes nacionales como el petróleo. Si se logra investigar a fondo, se verá cómo esas transacciones financieras también tuvieron “premios” para sus aprobadores.
Así como la configuración de las operaciones concebidas desde el nivel directivo superior, comienzan con decretos ad-hoc y delegación de funciones, en todos los casos, al bajar de nivel a directorios, ministros, gerentes, gerentes de operaciones, unidades técnicas para preparación de pliegos y términos de referencia, fiscalizadores, auditores y contratistas coludidos. Los jefes directos del ilícito,(ministros o gerentes) se preocupan más que del desarrollo del proyecto en sí, de la forma de cubrir las transferencias de los dineros recuperados a las cuentas adecuadas para lavar los activos y de buscar fondos adicionales para incrementar el costo.
De esa manera, lo que bajó en órdenes desde el poder político, regresa en depósitos en efecto inverso y gradual, con una división del producto ilícito conseguido en la operación en un 50% repartido entre los operadores del fraude y el otro 50% para los directores con el nivel jerárquico superior.
Esas deben ser las cuentas gordas cifradas, difíciles de detectar que estarán en poder de quienes nos robaron.